Historia Política Reciente.

La inestabilidad política que caracterizó a Panamá en la década de 1980 es pasado. Las elecciones presidenciales del 3 de mayo de 2009 constituyeron la cuarta oportunidad consecutiva en que la sociedad panameña eligió Presidente en comicios legítimos: 1994, 1999 y 2004, y la segunda desde que el último contingente de tropas estadounidenses se retiró de territorio panameño, luego de la entrega del Canal en diciembre de 1999.

De cara a las elecciones generales del 8 de mayo de 1994, resulta electa la coalición del bloque tripartito Pueblo Unido, liderado por el Partido Revolucionario Democrático (PRD) y su candidato presidencial, Ernesto Pérez Balladares, antiguo ministro de Hacienda durante el torrijismo e identificado con el ideario socialdemócrata.

El candidato del PRD asumió la Presidencia de Panamá el 1 de septiembre de 1994 sólo con 33,3%, quedando en segundo lugar Mireya Moscoso, de la coalición de centroderecha Alianza Democrática que obtuvo el 29.4% de los votos. En las legislativas, el PRD, aliado con los partidos Liberal Republicano y Laborista en el bloque Pueblo Unido, obtuvo la mayoría relativa con 33 de los 72 escaños de la Asamblea Legislativa.

Pérez-Balladares argumentó que necesitaba otro ejercicio para completar las reformas económicas y conducir sin contratiempos la cuenta atrás para la retrocesión del Canal, a culminar el 31 de diciembre de 1999. Así, impulsó en la Asamblea una serie de reformas constitucionales para permitir la reelección presidencial por otros cinco años, de la que, en caso de promulgarse, él sería el primer beneficiario.

Dos años más tarde, el 30 de agosto de 1998, fue derrotado en el referéndum que había convocado para llevar a cabo una serie de reformas constitucionales que pretendían incluir la reelección presidencial.

Por lo demás, el legado económico del Gobierno perredista no fue muy auspicioso: el índice de desempleo había alcanzado 15% y se evidenciaba una caída en las exportaciones.

El día de las elecciones, el 2 de mayo de 1999, la candidata de la oposición Mireya Moscoso (1999-2004) se adjudicó la victoria, con el 44,9% de los votos, sobre Martín Torrijos, que alcanzó 37,6%, representando a la coalición cuatripartita Nueva Nación, encabezada por el PRD.

Resultados que vinieron a normalizar la alternancia democrática en Panamá, siendo la primera vez que el Partido Revolucionario Democrático cedía el poder pacíficamente.

Moscoso es viuda de Arnulfo Arias, que fue tres veces Presidente de la República, y se convirtió en la primera mujer en ocupar ese cargo en Panamá. Representando al Partido Arnulfista, se presentó como heredera política de su difunto esposo.

La presidenta electa encabezaba la coalición Unión Por Panamá (UP), formada por el Partido Arnulfista, el Movimiento Liberal Republicano Nacionalista (MOLIRENA), el Movimiento de Renovación Nacional (MORENA) y Cambio Democrático. Esta coalición sólo obtuvo 24 escaños, mientras que la coalición encabezada por el PRD Nueva Nación obtuvo 42 de los 72 escaños.

La ausencia de una mayoría en el Congreso delimitó la gobernabilidad de la administración Moscoso. A pesar de que logró establecer un gobierno de unidad nacional a través de acuerdos con el Partido Solidaridad (PS), el Partido Liberal Nacional (PLN) entre otros, logró una precaria mayoría legislativa de 37 escaños.

En la práctica, el Gobierno no contó con el apoyo necesario para dar curso a las reformas impulsadas por el gobierno, especialmente en materia económica y social. Lo anterior desembocó en jornadas de movilizaciones y huelgas por la inconformidad en el manejo económico del Gobierno. Durante este período, la coyuntura panameña también estuvo marcada por acuerdos militares con Estados Unidos, y por la alta penetración de la corrupción en todos los sectores políticos del país.

De allí que las elecciones se llevaran a cabo en un escenario político marcado por la baja popularidad del gobierno de la presidenta Moscoso, lo que puso en una situación privilegiada a los líderes opositores.

El Partido Revolucionario Democrático (PRD) que continuaba siendo el partido dominante del sistema político, presentó nuevamente como candidato a Martín Torrijos Espino, hijo del ex gobernante Omar Torrijos (Presidente de facto de Panamá entre 1968 y 1978). Al margen de haber desarrollado una buena campaña electoral, debía a su apellido el protagonismo político alcanzado.

El 2 de mayo de 2004, Martín Torrijos apoyado por la alianza de centroizquierda Patria Nueva, formada por el Partido Revolucionario Democrático (PRD) y el Partido Popular (PP, antiguamente conocido como Demócrata Cristiano), logró el 47,53%, mientras que el ex Presidente Guillermo Endara (1989-1994) del Partido de derecha Solidaridad (PS) consiguió el 30,64%.

Asumiendo el primero de septiembre de 2004 como Presidente de Panamá, Martín Torrijos, enfocó su programa de gobierno en la modernización del Estado con propuestas de centro y acorde con los lineamientos de los organismos internacionales.

En materia internacional, el 2005 restableció las relaciones diplomáticas entre Cuba y Panamá, y entre Panamá y Venezuela. La ruptura de relaciones había tenido lugar un año atrás cuando la ex Presidenta Mireya Moscoso, absuelve y libera a  prisioneros cubanos anticastristas, sobre los que Cuba había solicitado la extradición. En este mismo año  2005 Martín Torrijos llevó a cabo la  reforma de  la Ley de la Seguridad Social (eleva la edad de jubilación y aumenta las cuotas), por lo que tuvo que hacer frente a  graves problemas por la oposición sindical y obrera, lo que afectó notoriamente su popularidad.

Durante este periodo, la banca, el comercio y el turismo fueron parte importante en la economía panameña, especialmente el comercio generado por la Zona Libre de Colón. En el ámbito económico, Panamá tuvo un sobresaliente crecimiento. De acuerdo con la CEPAL (2007) el PIB panameño aumentó en 7,2% en 2005, 8,7% en 2006 y 9,5% en 2007. En los mismos años, el PIB per cápita creció en 5,4%, 6,8% y 7,7% respectivamente.

Indudablemente, la ampliación del Canal de Panamá es el proyecto emblemático del auge panameño, el que fue aprobado por un referéndum realizado en el 2006[1]. Sin embargo, la percepción de corrupción se acentuó en los últimos años de gobierno del Presidente Torrijos.

En este escenario, los distintos partidos políticos panameños se prepararon para las elecciones generales, realizadas el 3 de mayo de 2009. La oposición fue unida a los comicios presidenciales, para obtener mayor ventaja competitiva ante el oficialismo.

La candidata oficialista, del Partido Revolucionario Democrático (PRD), fue la ex ministra de Vivienda Balbina Herrera, también apoyada por el Partido Popular (PP) y el Partido Liberal (PL).  No obstante, y como lo confirmaron los sondeos, resultó electo el empresario Ricardo Martinelli, fundador y líder de la agrupación de derecha Cambio Democrático (CD).

Martinelli aglutinó en una denominada Alianza por el Cambio (AD) bajo su candidatura presidencial a los tradicionales Partido Panameñista (PPa, antiguamente Partido Arnulfista), Movimiento Liberal Republicano Nacionalista (Molirena) y Unión Patriótica (UP).

Con el 91,22% de los centros de votación escrutados, Martinelli consolidó su triunfo con el 60,31% de los votos, mientras Herrera, del gobernante Partido Revolucionario Democrático (PRD), obtuvo 37,34%, y finalmente el ex Presidente Guillermo Endara 2,35% del Vanguardia Moral de la Patria.

El 22 de octubre de 2006 se llevó a cabo el referéndum para decidir la ampliación por vía transístmica. Los resultados mostraron un rotundo apoyo a la ampliación, con un 77,8% de votos favorables, contra un 22,2% de votantes que se manifestó opuestos al nuevo proyecto canalero.

 

 

 

 

 

Por su parte, los resultados en las elecciones Legislativa de la Asamblea Nacional también le dieron una cómoda mayoría a la Alianza por el Cambio (CD, Molirena, Partido Panameñista y Unión Patriótica), con el 57,2% de los escaños. La alianza Un País para Todos (PRD, Partido Popular y Partido Liberal) obtuvo 38,13%.

La lucha contra la pobreza y la corrupción, un cambio “profundo” del sistema fiscal y facilitar la inversión extranjera serán las prioridades que el nuevo Presidente señala deberá afrontar.

Martinelli subrayó que aumentará y reducirá los impuestos proporcionalmente a quienes tienen más y menos dinero. En materia de política internacional se declaró defensor de los principios de la Democracia y la Justicia, de ahí su deseo de mantener “unas excelentes relaciones” con España y EE.UU., los dos principales inversores extranjeros en Panamá.

 


[1] El 22 de octubre de 2006 se llevó a cabo el referéndum para decidir la ampliación por vía transístmica. Los resultados mostraron un rotundo apoyo a la ampliación, con un 77,8% de votos favorables, contra un 22,2% de votantes que se manifestó opuestos al nuevo proyecto canalero.