Chile: “Sin la incertidumbre de las reformas del gobierno la economía habría crecido entre 3,5% y 4% este año”

Luis Felipe Lagos, investigador de Libertad y Desarrollo (LyD), afirma que para nadie era una sorpresa que la economía iba a registrar en 2014 un crecimiento más lento que años anteriores, pero también admite que la magnitud del menor ritmo de actividad no estaba en el escenario base de ningún analista.

“La actividad está viviendo un proceso de desaceleración bastante brusco. Ha sorprendido por su intensidad y rapidez”, sostiene el experto. Al mismo tiempo, añade que el Banco Central en el Informe de Política Monetaria de septiembre (IPoM) hace un diagnóstico con respecto a las posibles causas que explican el freno, que parte con una baja muy fuerte en inversión y ahora se está reflejando en el consumo.

– La desaceleración ya se advertía a mediados de 2013. ¿Qué factor detonó esta caída más brusca?

– La sorpresa estuvo en el deterioro fuerte de las expectativas. Es un factor nuevo y fundamental que explica la intensa caída que tuvimos de la inversión. Ya a partir del cuarto trimestre de 2013 se comenzaron poco a poco a deteriorar las expectativas y ahora también está afectando el consumo. Acá el Banco Central es muy cuidadoso en que no hace una conexión entre el deterioro de las expectativas y el clima de incertidumbre, que -a mi parecer- se debe a las reformas que este gobierno quiere impulsar.

– ¿Este llamado “más político” que hizo el Banco Central para recuperar las confianzas se debe a su preocupación por el deterioro de las expectativas?


– Hubo varios comentarios que calificaron como un discurso político la intervención del Banco Central.Sin embargo, mi reflexión es que es que el ente emisor tiene que hacerlo por lo siguiente: está preocupado de hacer política monetaria y para hacerlo bien debe tener un buen diagnóstico. Y, por lo tanto, este diagnóstico, que incluye el deterioro de las expectativas, es una parte central del discurso que tiene que hacer el banco. A lo mejor debería identificar claramente cuál es el rol de las reformas que el gobierno está planeando y su influencia en la generación de incertidumbre y la desaceleración de la actividad, ya que no hace el vínculo directamente.

– ¿Es una forma de decir que no esperen que la política monetaria solucione los problemas de la desaceleración?

– La política monetaria no es el instrumento llamado a recuperar la caída en las expectativas. El problema de la economía chilena no es de financiamiento, por lo que la desaceleración no es atribuible a tasa de interés, el problema es el cómo despejar la incertidumbre que genera la desaceleración.

– ¿Cuánto del menor crecimiento de la economía se debe a los factores o ruidos internos por las reformas que se quiere impulsar?

– La economía chilena venía 
desacelerándose, eso es un hecho, pero las causas externas e internas como el término de ciclo minero, entre otras, llevaba a que la economía convergería al crecimiento entre 3,5% a 4%. Sin embargo, la actividad terminará creciendo entre 1,8% a 2% y esta diferencia, este aterrizaje forzoso, se debe a la gran cantidad de incertidumbre que introdujo por la serie de reformas.

Pero el gobierno ha dicho que con la aprobación de la reforma se termina la incertidumbre.

– Eso no es así, yo discrepo, porque si bien se aprobó, esta reforma tributaria no termina con la incertidumbre porque no es eficiente, ni tampoco amigable para el ahorro y la inversión. Es mejor que el proyecto original, pero no es un acuerdo que mejore respecto de la situación actual. Por eso, la incertidumbre se va a mantener, porque a medida que se vaya implementando el cambio impositivo, habrá gente que al darse cuenta que la economía pierde vigor planteará reducir la tasa de impuesto de primera categoría. En cambio, otros pedirán lo contrario al ver que no se está recaudando lo suficiente.

Próximas reformas

– El gobierno ha dicho que las reformas van de todas maneras.De ser así, ¿cómo se termina con la incertidumbre?

– Depende de cómo se realicen las reformas, porque más que no hacer las reformas, se deben hacer bien, de manera consensuada, con acuerdos amplios. Por ejemplo, en educación no se sabe todavía cuál es la reforma, como se mejorará la calidad. En lo laboral, conocemos sólo trascendidos, pero tampoco sabemos en qué va a terminar, en pensiones lo mismo y en lo político está la reforma constitucional. Por todo ello, la incertidumbre se produce porque no sabemos qué se va a hacer.

– Algunos economistas atribuyen responsabilidad al ministro Arenas como uno de los causantes de la incertidumbre e incluso piden su salida. ¿Cómo evalúa su desempeño?

– El ministro tuvo un problema en la partida, en la primera gran reforma que se discutió tuvo una actitud bastante soberbia y cerrada, primero en reconocer que todos le decían que iba a tener efectos en la economía cuando la evidencia que decía lo contrario era abrumadora. Después cambió su actitud y se abrió a perfeccionar el proyecto. Ahora, la discusión de cambiar o no al ministro no tiene mucho sentido, ya que si por ejemplo el gobierno decide cambiarlo, pero persiste con su reformas, el sólo hecho de removerlo de su cargo no modificará en nada el escenario de incertidumbres.

– ¿El gobierno se dio cuenta de la importancia de generar confianzas al llamar a cuidar las expectativas y realizar una alianza 
público-privada?¿Es suficiente?

– Lo que vemos es un discurso en que el gobierno llama al sector privado a trabajar juntos, a recuperar confianzas. Es un buen punto de inicio, pero no veo que se estén despejando las incertidumbres asociadas al resto de las reformas. No veo cómo van a cambiar las expectativas hacia 2015 ni cual sea el gatillador del cambio de expectativas. El llamado necesita hechos concretos.

– Para el próximo año el Central proyectó un crecimiento entre 3% y 4%. ¿Ve factible que se cumpla?

– Siguiendo con la respuesta anterior, ahora no veo cómo la economía pueda llegar a crecer entre 3% y 4%, ya que no se logra distinguir un cambio en las expectativas. Por eso, veo más bien que la economía crezca más cerca de 3% en 2015.

 

 

 

Publicado originalmente en Diario Financiero (Chile), el 18 de septiembre de 2014