Las Farc afirmaron en La Habana que, de llegar a firmarse el acuerdo de paz, “se les asignará en forma directa un número de curules en las instancias parlamentarias”.

‘Márquez’ afirmó que los escaños en el Congreso serían para “las Farc y para los partidos o movimientos políticos y sociales que surjan como resultado de la firma de un eventual acuerdo de paz”. Y agregó: “El acuerdo final contendrá definiciones precisas sobre la asignación de estas curules y de las que se pacten para asambleas departamentales y concejos municipales”.

Esta propuesta sale en el marco de los diálogos con el Gobierno Nacional en Cuba, donde se discute el segundo punto de la agenda, la participación política.

En la explicación de la guerrilla de las propuestas en ese punto, el grupo insurgente dejó en claro que, tras la firma del tratado, el Estado se compromete a “proveer los cambios institucionales, excepcionales y transitorios que se requieran para garantizar la participación directa en el poder legislativo, en las asambleas departamentales y en los concejos municipales durante los periodos que se determinen”. Cabe recordar que hoy, se prohíbe que alguien condenado penalmente pueda ser elegido congresista.

Las Farc insistieron en crear una circunscripción de paz en el Congreso, figura que contempla las curules. Y en este marco se propone “eliminar permanentemente cualquier prohibición o impedimento que pueda afectar el ejercicio de cualquiera de esas investiduras por parte de las organizaciones guerrilleras; la definición del umbral electoral, y las garantías electorales como la financiación estatal de las campañas”.

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Publicado originalmente en El Tiempo, el 2 de agosto de 2013

REDACCIÓN ELTIEMPO.COM