Costa Rica: El hiper-Estado costarricense

Por:

Juan Carlos Hidalgo

En:

El Financiero

País:

Columnas

Fecha:

14 de marzo de 2012

La noticia pasó un poco desapercibida porque fue publicada un sábado. Sin embargo el dato no deja de ser abrumador. Según La Nación, la Contraloría aprobó los planes de gasto de las 276 instituciones del sector público para el 2012 por la friolera de ¢11.6 billones. Cuando a eso se le suma el presupuesto del gobierno central (aproximadamente ¢6 billones), tenemos que la totalidad del aparato estatal costarricense consume o administra ¢17.6 billones, equivalente al 78% de la economía del país. ¡Vaya modelo neoliberal nos manejamos!

¿Desde qué óptica vemos los liberales este dato? Es sencillo, se puede decir que los políticos manejan el 78% de la economía costarricense. A esto hay que sumarle aquellos sectores privados de la economía que gracias a subsidios, exenciones y protecciones arancelarias también dependen del beneplácito de los políticos. De tal forma, en Costa Rica el corazón, pulmones y cerebro de la economía es el Estado, no el sector privado. Si aún le quedan dudas sobre la conveniencia de este situación, le pregunto: ¿qué opina Ud de los políticos?

Costa Rica cuenta con un hiper-Estado. Tenemos al Estado metido en todo: seguros, telecomunicaciones (y pronto hasta televisión por cable), correos, guaro, trenes, puertos, combustibles, banca y un largo etcétera. Algunos podrán argumentar que en instituciones como la banca las decisiones se toman como si fuera el sector privado. Pero veamos un ejemplo: Cuando Fernando Naranjo, una renombrada figura del PLN, fue nombrado presidente del Banco Nacional, hasta él mismo admitió que no contaba con experiencia alguna en banca. Aún así, se le puso a cargo del banco más grande del país. Si no contaba con los requisitos mínimos para su puesto, ¿por qué lo nombraron? La historia se repite en todo el sector público. Rara vez vemos figuras competentes como Miguel Carabaguiaz al frente de una institución estatal. Casi siempre la gente llega a esos puestos por sus influencias políticas y no por su competencia para el cargo.

Cuando los presupuestos de 276 instituciones públicas representan el 78% de la economía nacional, creo que muchos estarán de acuerdo conmigo en que Costa Rica necesita un Estado más pequeño.

 

* Juan Carlos Hidalgo es coordinador de proyectos para América Latina en el Cato Institute, en Washington, DC.

Fuente: El Financiero (Costa Rica), 7 de marzo de 2012